Tras un disputado balotaje, el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, se impuso al actual presidente Jair Bolsonaro, en una contienda que sólo se definió en los minutos finales de la apuración. Lula da Silva, alcanzó el 50,90 por ciento, correspondientes a 60.345.825 votos, mientras Jair Bolsonaro, obtuvo el 40,10 con 58.206.322 votos.
Hasta llegar a la presidencia por tercera vez, Lula da Silva enfrentó una serie de problemas, sufrió una condenación judicial que lo llevó a estar preso por 580 días. Más adelante, el Supremo Tribunal Federal, anuló la condenación, por considerar al juez del caso Sergio Moro parcializado. A seguir, la Corte le devolvió a Lula da Silva sus derechos políticos.
El escenario estaba polarizado, por un lado, los seguidores de las pautas conservadoras del Bolsonaro, apoyado por las iglesias evangélicas y por otro un porcentaje importante de brasileros que entendía que la gestión de este presidente, representaba un retroceso a todas las conquistas alcanzadas en los últimos años.
Para hacer viable su candidatura, Lula necesitó formar un amplio arco de alianzas, en el que incluyó a su histórico adversario Geraldo Alkimin, quien precisamente fue su candidato a vicepresidente. Por esta decisión, fue blanco de muchas críticas de antiguos aliados, que hasta la fecha, no ven con buenos ojos que el ex gobernador de Sao Paulo, haya hecho parte de la plancha presidencial.
El gobierno de Jair Bolsonaro siempre fue visto por analistas políticos, como controvertido, su defensa a ultranza del porte de armas, incomodaba a sectores importantes del electorado. De hecho, a pocos días de las elecciones hubo actos de violencia de sus correligionarios, que podrían haber inclinado la balanza a favor de la candidatura de Lula da Silva.
El flamante presidente electo, deberá lidiar con un Congreso que le será francamente hostil, en el que la gran mayoría de los parlamentarios, le hará oposición. Lula tiene una gran experiencia de sus dos mandatos previos y ahora, a partir del primero de enero del 2023, cuando tome posesión de su cargo, tendrá la oportunidad de cumplir sus promesas de campaña que tanta esperanza generaron en el pueblo brasilero.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter
