Los espectadores del Carnaval de Río de Janeiro presenciaron un emotivo homenaje por parte de la escuela de samba Salgueiro, a los yanomami, el grupo indígena más grande de Brasil. Mientras los bailarines y músicos desfilaban en el Sambódromo con sus rostros pintados de rojo al estilo indígena y mensajes como “Mineros fuera” escritos en sus tambores, transmitían un mensaje urgente sobre la crisis que enfrenta esta comunidad.
Davi Kopenawa, líder yanomami y chamán, asesoró a la escuela de samba Salgueiro sobre cómo mantenerse fiel a la cultura yanomami y participó en el desfile con otros 13 yanomami. Su presencia destacada en el Carnaval buscaba llamar la atención sobre los devastadores efectos de la minería ilegal en el territorio yanomami, incluida la contaminación de los ríos, la hambruna y la enfermedad.
¿Cómo ha afectado la minería ilegal a los yanomami?
Unos 30.000 yanomami viven en el territorio indígena más grande de Brasil, que abarca más de 9 millones de hectáreas en la zona norte del bosque amazónico, junto a la frontera con Venezuela.
Tres semanas después de asumir la presidencia, Lula declaró una emergencia de salud pública y envió a las fuerzas armadas, médicos, enfermeras y alimentos. Aun así, 300 yanomami murieron por diversas causas en 2023, según el Ministerio de Salud.
Lula creó con rapidez un equipo interministerial encargado de combatir la minería ilegal, y en 2003 la agencia medioambiental brasileña destruyó un récord de 33 aeronaves encontradas en territorio Yanomami o sus alrededores. Los agentes también destruyeron y confiscaron barcazas mineras, combustible, sierras eléctricas, dispositivos de internet Starlink y campamentos.
Según reportes del gobierno, desde el inicio de la operación, las zonas con minería ilegal en territorio Yanomami han bajado un 85% y la salud de la comunidad ha mejorado. Pero tras el éxito inicial de la operación, fiscalía, fuerzas de seguridad y empleados de agencias federales de medio ambiente dicen que los mineros ilegales están regresando.
¿Qué pasa con el gobierno?
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se encuentra bajo presión para cumplir sus promesas de erradicar la minería ilegal en el territorio yanomami. Lula declaró una emergencia de salud pública para los yanomami en la Amazonía, debido a la malnutrición y enfermedades como la malaria causadas por la minería ilegal.
Aunque el gobierno brasileño ha tomado medidas para combatir la minería ilegal en el pasado, los esfuerzos han enfrentado obstáculos significativos. A pesar de una reducción del 85% en las zonas con minería ilegal en el territorio yanomami, los mineros ilegales están regresando y adaptándose para eludir las fuerzas de seguridad.
Las asociaciones que representan a trabajadores federales en asuntos ambientales e indígenas han acusado a las fuerzas armadas de no cumplir su misión de respaldar y facilitar la labor de otras agencias contra la minería ilegal. Los ataques violentos a agentes del Ibama y de la policía federal se están volviendo más frecuentes, lo que dificulta aún más los esfuerzos de control.
A medida que la situación en la Amazonía se intensifica, los líderes yanomami y los defensores del medio ambiente instan al gobierno brasileño a tomar medidas más firmes y permanentes para proteger el territorio y la salud de esta comunidad indígena vulnerable. Mientras tanto, la amenaza de la minería ilegal continúa, dejando en el aire el futuro de los yanomami y la selva amazónica.
Redacción de: Karen Rodríguez A.