En Brasilia, se encuentran acampadas más de 7 mil personas representando a 176 comunidades aborígenes. La ocupación de la capital, se realiza en protesta a las actitudes y políticas contra los nativos por parte del gobierno de Jair Bolsonaro.
A través de la marcha, los miembros de los pueblos originarios, exigen su derecho a la demarcación de sus territorios, se oponen al extrativismo, así como a la explotación ambiental de sus territorios. Estos temas están en su propuesta “Campamento Tierra Libre 2022″.
Su protesta se centra en la norma que se conoce como Marco Temporal, que ignora sus derechos territoriales y que ahora se analiza en el Supremo Tribunal Federal. Asimismo, en los proyectos de ley que liberan la licencia ambiental, permiten la explotación de la tierra y el uso de pesticidas.
En las marchas se observan las más diversas manifestaciones culturales y artísticas de la población originaria brasilera, son bailes, cantos y consignas de su riquísima cultura nativa. Es su forma de decir, existimos y merecemos más respeto.
Por otro lado, según informaciones de los propios manifestantes, la marcha se encamina al Congreso Nacional y finalizará en el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública en Brasilia, donde exigirán el fin de la Ley del Marco Temporal, propuesta por el actual gobierno.
Según Bolsonaro, muy pocos aborígenes viven en mucha tierra, lo que bloquearía la expansión agrícola. Los nativos, por el contrario, saben que no demarcar sus territorios, restringe sus derechos en el espacio rural.
Para los representantes de las comunidades indígenas, de no revocarse la normativa del Marco Temporal, no se demarcarán sus tierras, haciéndolos víctimas fáciles de todo tipo de invasores. Con el pasar del tiempo, se configurará un verdadero etnocidio y no se eliminará el genocidio indígena en ese gigantesco país, finalizaron.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter