El gobierno canadiense ha comenzado a ofrecer autobuses a ciudadanos que buscan abandonar Israel, Cisjordania e incluso Irán, en medio del creciente conflicto regional, pero la respuesta ha sido limitada. Días después de instar a los canadienses a encontrar rutas propias hacia países vecinos, Ottawa puso en marcha servicios de transporte para facilitar su salida, aunque solo un pequeño número ha optado por utilizarlos.
Según Asuntos Globales de Canadá, cerca de 6.000 canadienses se han registrado en Israel, más de 400 en Cisjordania y unos 5.500 en Irán. Sin embargo, el número real podría ser considerablemente mayor, de acuerdo con Dennis Horak, exembajador canadiense en Medio Oriente.
Hasta ahora, solo 55 personas han tomado el autobús desde Tel Aviv a Jordania y siete desde Cisjordania. Un vuelo fletado desde Áqaba (Jordania) a Atenas, con capacidad para 265 personas, fue abordado por apenas 100 pasajeros, cada uno pagando una tarifa de recuperación de costos de 400 dólares. Desde Atenas, los canadienses deben gestionar su retorno con apoyo consular.
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Pocas opciones desde Irán, donde la presencia diplomática canadiense es nula
Canadá cerró su embajada en Irán en 2012, lo que limita seriamente su capacidad de respuesta. Aun así, ha desplegado autobuses en la frontera con Turquía y mantiene funcionarios consulares en países vecinos para asistir a quienes logren salir. Hasta ahora, solo 10 canadienses han usado los buses dispuestos para cruzar desde Irán.
Además, se han facilitado trámites para que más de 100 ciudadanos canadienses ingresen a Azerbaiyán. No obstante, muchos enfrentan dificultades serias para obtener información debido al limitado acceso a Internet, la congestión de calles y el racionamiento de combustible tras el ataque con misiles de Israel contra Irán el pasado 13 de junio.
En un gesto diplomático inusual, la ministra de Asuntos Exteriores, Anita Anand, habló el domingo con su homólogo iraní, Abbas Araghchi, enfatizando la seguridad de los ciudadanos canadienses en la región. Según Horak, se trataría de la primera comunicación oficial entre ambos países en años.
Espacio aéreo cerrado y creciente tensión en la región
La situación en Medio Oriente se ha deteriorado rápidamente. El lunes, Irán disparó misiles contra la base aérea de Al-Udeid en Qatar, en aparente represalia por el ataque israelí del fin de semana contra sus instalaciones nucleares. Qatar afirmó haber frustrado el ataque y evacuado la base a tiempo. Como resultado, Canadá actualizó su alerta de viaje para ese país, recomendando un “alto grado de precaución”.
Mientras el espacio aéreo permanece cerrado en gran parte de la región, los esfuerzos de evacuación canadienses se ven limitados. Ottawa afirma tener más espacio disponible en vuelos que ciudadanos dispuestos a abordarlos, lo que refleja la complejidad de operar sin una presencia diplomática directa y con capacidades limitadas en un entorno tan volátil.
Asuntos Globales Canadá continúa instando a los ciudadanos a permanecer atentos a las indicaciones locales y buscar refugio cuando sea necesario, pero reconoce que las restricciones operativas en la región dejan pocas alternativas viables más allá de los esfuerzos actuales.
Redacción de: Karen Rodríguez A.