Más de 700 personas damnificadas y 64 viviendas destruidas es el saldo parcial de un enorme derrumbe en la Vía Panamericana, la principal carretera del suroeste de Colombia, según informó el presidente colombiano, Gustavo Petro.
“Hay 164 familias ya en albergues, 64 casas fueron completamente destruidas, en toda la zona hay más de 700 personas damnificadas”, dijo el jefe de Estado en Cali a donde llegó luego de suspender una visita de Estado a Chile para regresar a Colombia y enfrentar el derrumbe en el departamento del Cauca.
El derrumbe ocurrió el 9 de enero en el municipio de Rosas donde el deslizamiento arrasó con viviendas de varias veredas de la zona como La Soledad. Hasta el momento, no hay pérdida en vidas humanas porque las familias fueron evacuadas con anterioridad en una operación en la que intervinieron la Fuerza Aérea Colombiana (FAC), la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y otros organismos como la Defensa Civil y la Cruz Roja.
“Hoy podemos decir que la Unidad Nacional de Gestión del Riesgos logró evitar una tragedia porque la previó evacuando previamente a las familias de la zona del desastre, por eso no hay muertos”, puntualizó Petro.
El gobernante colombiano afirmó que el Gobierno estudia las medidas “tanto de urgencia como de mediano y largo plazo para lograr una conectividad fundamental, que es la del sur del país, la que tiene que ver prácticamente con toda Suramérica”. Asimismo, anunció “inversiones billonarias” para hacer un trayecto de 70 kilómetros de la Panamericana lejos de la zona en la que hay una falla tectónica. Además, aseguró que se comprarán haciendas cercanas para reubicar a la población damnificada que “no puede volver al mismo lugar” por el riesgo que corre.