El Comité Noruego del Nobel ha otorgado el Premio Nobel de la Paz a la organización japonesa Nihon Hidankyo, que representa a los sobrevivientes de los bombardeos atómicos sobre Hiroshima y Nagasaki, en reconocimiento a su incansable activismo contra las armas nucleares. El Nobel de la Paz está dotado con 11 millones de coronas suecas (equivalentes a 1 millón de dólares) y será entregado en Oslo en diciembre.
Este galardón llega en un contexto internacional marcado por crecientes tensiones nucleares. El Comité destacó la labor de Nihon Hidankyo al convertir el dolor y el sufrimiento de los sobrevivientes de los ataques atómicos de 1945 en una fuente de esperanza y compromiso con la paz.
Jorgen Watne Frydnes, presidente del Comité, explicó que el premio fue concedido en un momento en que “el tabú contra el uso de armas nucleares está bajo presión”, en referencia a la reciente modificación de la doctrina nuclear rusa anunciada por el presidente Vladimir Putin. Este cambio busca disuadir a Occidente de permitir que Ucrania realice ataques de mayor alcance en el marco de la guerra que enfrenta a ambos países.
Este premio se entrega en un año marcado por varios conflictos devastadores, incluidos la guerra en Oriente Medio, donde la violencia entre Israel y los grupos militantes Hamás y Hezbolá ha causado decenas de miles de muertes, y la prolongada invasión rusa en Ucrania, que sigue cobrándose vidas humanas en ambos lados.
Esfuerzos del Premio Nobel de la Paz
El Nobel de la Paz ya ha reconocido anteriormente los esfuerzos por erradicar las armas nucleares. En 2017, la Campaña Internacional para Abolir las Armas Nucleares (ICAN) también fue galardonada, y en 1995, el premio fue para las Conferencias Pugwash por su trabajo para reducir el papel de las armas nucleares en la política internacional.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, aplaudió el reconocimiento, señalando que “el espectro de Hiroshima y Nagasaki todavía se cierne sobre la humanidad”. Añadió que el premio a Nihon Hidankyo envía un poderoso mensaje sobre la necesidad de recordar y proteger a las generaciones futuras de los horrores de una guerra nuclear.
Redacción de: Karen Rodríguez A.