El gobierno de Estados Unidos impuso el jueves sanciones contra 16 aliados clave del presidente venezolano Nicolás Maduro, acusándolos de obstruir las elecciones presidenciales de julio y cometer abusos contra los derechos humanos. Entre los sancionados se encuentran altos funcionarios del Tribunal Supremo, líderes de las fuerzas de seguridad y fiscales del gobierno.
La medida surge después de la polémica en torno a las elecciones del 28 de julio, en las que el exdiplomático Edmundo González Urrutia, representante de la oposición, afirmó haber ganado con un amplio margen. Sin embargo, las autoridades electorales de Venezuela declararon a Maduro como vencedor poco después del cierre de urnas, sin proporcionar recuentos detallados de los votos, alegando un supuesto ataque al sitio web del Consejo Nacional Electoral.
En respuesta a las demandas de transparencia, la campaña de González publicó los recuentos de votos de más de dos tercios de las máquinas de votación, mostrando que Maduro había perdido. A pesar de esto, el Tribunal Supremo, controlado por partidarios de Maduro, auditó los resultados y reafirmó su victoria.
La comunidad internacional ha expresado una fuerte condena a la falta de transparencia. Organismos como la ONU y el Centro Carter, que supervisaron las elecciones, declararon que los resultados oficiales carecían de credibilidad. Aunque la ONU no validó oficialmente la victoria opositora, reconoció que los registros de votación publicados por la oposición cumplían con los estándares de seguridad.
Declaraciones oficiales
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, acusó al régimen de Maduro de “proclamar falsamente su victoria” y de reprimir a la oposición para mantenerse en el poder. Además de las sanciones financieras, Estados Unidos impuso restricciones de visa a más personas involucradas en la obstrucción de las elecciones.
El impacto de estas sanciones es incierto, ya que muchos de los aliados de Maduro ya sancionados continúan desempeñando roles importantes en el gobierno venezolano. Un funcionario de la administración Biden indicó que esperan que estas sanciones lleven a los partidarios de Maduro a reconsiderar su lealtad.
En una declaración conjunta presentada en la ONU, más de 50 países instaron al Consejo Nacional Electoral venezolano a publicar los resultados completos y permitir una verificación independiente. Asimismo, denunciaron las represalias contra la oposición, como detenciones arbitrarias y tácticas de intimidación.
Redacción de: Karen Rodríguez A.