El ejército de Ucrania informó que estaba trabajando para evacuar a todas las tropas restantes de su último bastión en el puerto sitiado de Mariupol, cediendo así el control de la ciudad a Rusia después de meses de bombardeos.
La evacuación posiblemente marcó el final de la batalla más larga y sangrienta de la guerra y una derrota significativa para Ucrania. Mariupol se encuentra ahora en ruinas después de un asedio ruso que, según Ucrania, mató a decenas de miles de personas en la ciudad.
Con el resto de Mariupol en manos rusas, cientos de soldados y civiles ucranianos se habían escondido debajo de la acería Azovstal de la ciudad. Los civiles que estaban dentro fueron evacuados en las últimas semanas, y más de 260 soldados, algunos de ellos heridos, abandonaron la planta hacia las áreas controladas por Rusia el lunes por la noche.
Desde que Rusia lanzó su invasión en febrero, la devastación de Mariupol se ha convertido en un símbolo tanto de la resistencia de Ucrania como de la voluntad de Rusia de destruir las ciudades ucranianas que resisten.
Las primeras evacuaciones se produjeron a última hora este lunes, después de que Rusia dijera que había accedido a evacuar a los soldados ucranianos heridos a un centro médico en Novoazovsk.