En una colina de Lima, cubierta hasta hace unos meses por toneladas de basuras, arqueólogos peruanos descubrieron cinco momias pertenecientes a culturas anteriores al Imperio Inca, en un sitio sagrado conocido como “huaca”, término quechua que significa oráculo o lugar sagrado.
Los restos funerarios, que datan de alrededor de 1.000 años de antigüedad, comprenden cuatro cuerpos infantiles y uno adulto, colocados en posición fetal y envueltos en fardos de lianas vegetales. Este descubrimiento fue anunciado por el arqueólogo peruano Luis Takuda, quien lidera el proyecto de investigación “Huaca La Florida”.
El Ministerio de Cultura informó sobre la existencia de más de 400 huacas en Lima, sitios sagrados que forman parte del paisaje cotidiano de la ciudad.
Los restos óseos hallados pertenecen a la cultura preincaica Ichma y fueron encontrados en las escaleras de un templo de adobe en forma de “U”, característica arquitectónica de las construcciones preincas. La causa de las muertes de estos restos aún no ha sido determinada.
En junio, el mismo equipo de investigación descubrió otro esqueleto con largos cabellos en posición decúbito dorsal.
Hector Walde, decano del colegio profesional de arqueólogos de Perú, señaló que, aunque los sacrificios humanos eran comunes en la época prehispánica, los fardos hallados representan entierros normales de personas sepultadas en espacios sagrados ya en desuso.
Este hallazgo arqueológico ha sido precedido por meses de trabajo de excavación, que implicaron la eliminación de hasta ocho toneladas de basura que cubrían la cima de la colina. También se tuvo que retirar a personas sin hogar o con adicciones que solían refugiarse en los alrededores.
Walde lamentó la ocupación informal de zonas cercanas a las huacas en la capital peruana, lo que ha resultado en la destrucción de estos sitios de importancia histórica y cultural.
Redacción de: Karen Rodríguez