Teniendo en cuenta que ya se acerca la temporada de frío y lluvia, y que con esta llegan las gripas y resfriados, el gobierno de Ontario ha decidido implementar una campaña de vacunación contra la influenza nunca antes vista en la historia de la provincia.
“Hemos estado trabajando durante el verano para poner en marcha un plan sólido y completo para abordar una segunda ola potencial y más desafiante de COVID-19. Es importante que nos preparemos para cualquier escenario con el fin de proteger a todos nuestros ciudadanos, especialmente a nuestros adultos mayores y más vulnerables. Nuestro gobierno está haciendo todo lo posible para derrotar este virus mortal, incluida la realización de una campaña de vacunación contra la gripe sin precedentes para mantener la capacidad en nuestro hospitales”, afirmó el Premier Ford durante el anuncio de esta campaña junto con Christine Elliott, viceprimera ministra y ministra de Salud.
Esta campaña, entra como parte esencial del plan integral para preparar al sistema de salud frente a una segunda ola de coronavirus. El plan conocido como “Keeping Ontarians Safe”, establece una serie de pasos para prevenir, identificar y responder a cualquier escenario de brote este otoño, algunos son:
- Mantener fuertes medidas de salud pública, incluida la expansión continua de las pruebas y la gestión de casos y contactos;
- Identificar, administrar y prevenir rápidamente los brotes de COVID-19;
- Acelerar los esfuerzos para reducir los retrasos en los servicios de salud;
- Prepararse para los aumentos repentinos en los casos de COVID-19;
- Reclutar, retener, capacitar y apoyar a los trabajadores de la salud, sin dejar de involucrar a las familias y los cuidadores; e
- Implementar la campaña de vacunación contra la influenza más grande en la historia de Ontario.
“Nuestro gobierno ha estado trabajando directamente junto con nuestros socios en la primera línea para garantizar que el sistema de salud esté listo para lidiar con cualquier ola futura de COVID-19. Si bien nuestra mejor defensa siguen siendo nuestras acciones diarias para detener la propagación, como practicar el distanciamiento físico, usar máscaras faciales y quedarse en casa cuando estamos enfermos, hemos desarrollado un plan que nos prepara para cualquier eventualidad, incluida la inminente temporada de gripe y resfriado”, comentó la ministra Elliott.
La gripe es un desafío adicional que se suma en momentos de extrema crisis de salud mundial, es por esto que la provincia invertirá casi $70 millones para comprar vacunas contra la influenza y realizar la campaña de vacunación más grande en la historia de Ontario. De igual forma, la provincia ha implementado otras medidas como:
- Solicitar 5,1 millones de dosis de vacunas contra la gripe en asociación con el gobierno federal y otras provincias y territorios, 700.000 más que el uso aproximado del año pasado. Esto incluye 1,3 millones de dosis de vacunas de dosis alta para personas mayores de Ontario, especialmente aquellas con problemas de salud preexistentes;
- Dar prioridad a la distribución temprana de la vacuna contra la influenza para poblaciones vulnerables en hogares de cuidados a largo plazo, hospitales y hogares de ancianos;
- Invertir $26.5 millones adicionales para comprar dosis adicionales de vacuna contra la influenza si es necesario y están disponibles a través del programa nacional de adquisición de vacunas a granel;
- Mejorar el acceso mediante la asignación de dosis altas de vacunas contra la influenza para personas mayores a las farmacias participantes; y
- Lanzar una campaña de educación pública para fomentar la vacunación contra la gripe.
Para todos los interesados en vacunarse, y que sean mayores de 6 meses, lo podrán hacer en las próximas semanas en los consultorios de los proveedores de atención primaria y las unidades de salud pública; para los mayores de 5 años, lo podrán hacer en las farmacias participantes. El vacunarse contra la gripe no es una vacuna contra el coronavirus por ende, los residentes de Ontario deberán seguir cumpliendo con los protocolos de bioseguridad de salud pública, que incluyen el uso de una cubierta facial, lavarse las manos con frecuencia y mantener la distancia física de quienes se encuentran fuera de su hogar o círculo social.
Los padres, maestros y estudiantes de Ontario todavía han estado esperando el anuncio formal del primer ministro Doug Ford sobre si las escuelas reabrirán o no junto con el resto de la provincia en las próximas semanas, pero Ford, ya confirmó que los estudiantes no regresarán a la escuela en persona antes de las vacaciones de verano.