Ya muchos han escuchado de la nueva medida implementada por el gobierno de Quebec, la cual consiste en implementar un impuesto sobre los no vacunados para compensar los costos médicos para tratar a las personas con COVID-19, algo que tiene aterrados a los residentes de Ontario pero, es justo aclarar que este aún no ha considerado implementar dicho impuesto.
El anuncio del impuesto “significativo” lo realizó el primer ministro François Legault, quién afirmó que este cubrirá el aumento de los costos de las hospitalizaciones en cuidados intensivos, ya que los residentes no vacunados representan solo el 10% de la población adulta de Quebec, pero comprenden aproximadamente la mitad de los ingresados en la UCI con la enfermedad. “En este momento, estas personas ponen una carga muy importante en nuestra red de atención médica. Creo que es normal que la mayoría de la población esté pidiendo que haya una consecuencia”, dijo.
Por su parte, el Dr. Kieran Moore, Director Médico de Salud, afirmó que dicho impuesto no está bajo consideración para el gobierno de Ontario. “Nunca hemos hecho esa recomendación al gobierno durante esta pandemia. No es uno que presentaríamos, en mi opinión, parece punitivo”, dijo Moore. También dijo que el gobierno siempre ha apoyado a los adultos que toman decisiones informadas sobre la vacunación y ha tratado de aumentar la disponibilidad y accesibilidad, sin embargo, sí dio a conocer que en los entornos de mayor riesgo es dónde realmente exigen la vacunación pero nunca se ha contemplado imponer una sanción a los que no han sido vacunados.
