La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, firmó un proyecto de ley el martes que amplía la definición legal de violación en el estado para incluir varias formas de contacto sexual no consensuado. La ley actual, que limita la violación a la penetración vaginal por un pene, fue un factor clave en el caso de difamación y abuso sexual de la escritora E. Jean Carroll contra el expresidente Donald Trump.
El jurado del juicio civil federal rechazó las afirmaciones de Carroll en mayo pasado, encontrando a Trump responsable de un grado menor de abuso sexual en lugar de la violación. La nueva ley redefine la violación para abarcar el contacto sexual anal, oral y vaginal no consensuado. La medida entrará en vigencia a partir del 1 de septiembre y busca proporcionar una base legal más sólida para las víctimas de violación.
La gobernadora Hochul destacó el caso de Carroll durante la ceremonia de firma del proyecto de ley en Albany, señalando que la limitada definición anterior dificultaba la persecución efectiva de casos de violación. Hochul expresó que la revisión de la ley es crucial para evitar tecnicismos físicos que pueden confundir a los jurados y humillar a los sobrevivientes, creando una “área legal gris” que los acusados pueden explotar.
Antes de esta modificación, Nueva York consideraba la penetración de la vagina u otros orificios corporales con cualquier objeto que no fuera un pene como “abuso sexual”, en lugar de “violación”. La nueva definición ahora alinea la legislación con la criminalización del contacto sexual oral, anal y vaginal no consensual en otros estados.
Qué opinan los expertos
Sandi Johnson, asesora principal de políticas legislativas de la Red Nacional de Violación, Abuso e Incesto, destacó que las nuevas directrices validan las experiencias de los sobrevivientes y eliminan la distinción entre diversas formas de contacto sexual no deseado.
Por su parte, el senador estatal Brad Hoylman-Sigal, quien patrocinó la legislación, enfatizó que estos cambios también facilitarán que los miembros de la comunidad LGBTQ responsabilicen a los perpetradores de delitos sexuales. Antes de esta reforma, muchas agresiones no podían clasificarse como violación en Nueva York, según Hoylman-Sigal.
Redacción de: Karen Rodríguez A.