El proyecto de ley 96 de la Coalición Avenir Quebec, designado a proteger y reforzar el idioma francés en Quebec, puede haber sido aprobado a principios de esta semana, no obstante, eso ha hecho poco para sofocar la oposición de la comunidad de habla inglesa a la legislación.
Quebecers Against Bill 96, un grupo creado por la Red de Grupos Comunitarios de Quebec (QCGN), la Asociación del Comité de Padres de Inglés, la Asociación de la Junta Escolar de inglés de Quebec (QESBA) y la Federación de Asociaciones de Hogar y Escuela de Quebec organizaron un mitin el jueves por la tarde en el centro de Montreal invitando a la comunidad a manifestar sus preocupaciones.
El proyecto de ley 96 se convirtió en ley el martes en la Asamblea Nacional, con una votación de 78 a 29 con el voto a favor del CAQ gobernante y el solidario de Quebec y el voto en contra del Parti-Québécois y los liberales.
Mientras que el Premier de Quebec, François Legault, promocionó el proyecto de ley como moderado, Quebecers Against Bill 96 cree que la legislación es “de gran alcance y discriminatoria”.
El director ejecutivo de QESBA, Russell Copeman, habló con Global News expresando su “tristeza y frustración”.
“Sabes, durante mucho tiempo hemos sostenido que este proyecto de ley es malo para los quebequenses de habla inglesa y malo para Quebec en general”, señaló. “Ver que se adoptó con muy pocos cambios y, ya sabes, muy pocas mejoras, es decepcionante”.
La principal preocupación de QESBA es cómo afectará el proyecto de ley a la educación.
Antes de la adopción del proyecto de ley, los ciudadanos extranjeros que se hallaban temporalmente en Quebec podían enviar a sus hijos a una escuela de inglés durante su estadía en la provincia. Ese período se ha reducido a tres años.
Adicional a lo anterior, el otro tema de preocupación es que el proyecto de ley podría obligar a que las comunicaciones internas entre las juntas escolares se realicen en francés, incluso entre los funcionarios de habla inglesa.