Siguiendo el ejemplo de varios bares y restaurantes, algunos gimnasios en Toronto han decidido cerrar sus operaciones de inmediato durante la temporada navideña debido al aumento del número de casos de COVID-19 y la transmisión comunitaria en la ciudad.
A través de las redes sociales y con un mensaje deseando lo mejor a sus clientes, un puñado de gimnasios independientes anunciaron sus cierres temporales;tal es el caso de Sweat and Tonic que ha emitido un aviso en Instagram diciendo que “en base a las condiciones que cambian rápidamente y al aumento de casos de COVID-19 en nuestra comunidad … hemos decidido que el mejor curso de acción es cerrar por las vacaciones temporada.”
Spokehaus en City Place, Quest Health & Performance en Wallace-Emerson, Soul Fuel Fitness en Roncesvalles y One Academy en Leslieville también hicieron publicaciones similares en las redes sociales en los últimos días. La mayoría todavía ofrece las clases en línea a las que pasaron antes de la pandemia.
La medida se debe aparentemente a una gran precaución en interés de la salud y la seguridad públicas, pero también en el interés de mantener a la industria a salvo de futuros bloqueos, que de hecho pueden ocurrir de todos modos después de que se anunciara una nueva serie de restricciones para todos en Ontario la semana pasada.
Con límites de capacidad del 50% ahora establecidos para gimnasios y todos los demás entornos interiores, así como reglas adicionales de cierre a las 11:00 p.m para el servicio interno en bares y restaurantes: muchas empresas han decidido que permanecer abiertas durante las próximas semanas no vale la pena financieramente.
Y si le sumamos a eso las exposiciones potenciales desenfrenadas de COVID-19 entre los clientes y el personal a medida que la variante de Omicron afortunadamente más suave pero desafortunadamente más transmisible hace su ronda, la elección se vuelve bastante fácil para algunos.
