El pasado jueves 8 de septiembre, la monarca más longeva de la historia de Reino Unido, Isabel II falleció en su residencia escocesa de Balmoral, rodeada de su círculo más cercano a los 96 años. Al siguiente día, Carlos de Gales fue coronado rey, siguiendo la línea de sucesión, como Carlos III de Inglaterra. No obstante, nadie sabía la causa de la muerte de Isabel II.
Desde el Palacio de Buckingham no se especificó la causa de la muerte, por lo que lo que se pensó fue una muerte natural debido a la avanzada edad de Isabel II. Además, dos días antes de su fallecimiento, recibió en Balmoral a la recién electa primera ministra británica, Liz Truss, sin aparentes síntomas de enfermedad.
Un rumor que se está empezando a extender y es que la reina Isabel II pudo haber muerto por una caída. “Lo que yo he oído es que ha sufrido una caída. A esta edad, si se cae en la ducha o por la escalera puede ser fatal”, explicó Charles Elwell.
Eso sí, el excapitán Elwell aclaró que no tiene una confirmación de dicha teoría, pues sería una más de las posibles causas de la muerte de la antigua monarca. Otro rumor apunta a que Isabel II padecía leucemia desde hace tiempo, lo que fue deteriorando su estado de salud paulatinamente.
