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Hallazgo fósil revela un pasado subtropical en Canadá

Un reciente estudio ha revelado que hace 48 millones de años, el actual subártico de Canadá estaba cubierto de palmeras y albergaba un ecosistema similar al de los subtrópicos modernos. Este descubrimiento ofrece nuevas perspectivas sobre los antiguos climas árticos y el impacto del cambio climático a lo largo de la historia del planeta.

La investigación, publicada en la revista Annals of Botany, fue liderada por Peter Siver, profesor del Connecticut College, en colaboración con científicos de Canadá y Polonia. Los investigadores analizaron fitolitos, pequeñas estructuras de sílice presentes en las plantas, halladas en sedimentos de antiguos lagos en los Territorios del Noroeste de Canadá. 

Estos fósiles fueron extraídos de un sitio conocido como la localidad de tubo kimberlítico Jirafa, una formación geológica que ha conservado restos de vegetación de la era del Eoceno.

Canadá alguna vez fue un paraíso tropical

El análisis de estos fósiles confirma que la región mantuvo temperaturas cálidas durante todo el año, incluso en los meses de oscuridad invernal. Además de los restos de palmeras, los científicos encontraron fósiles de organismos acuáticos adaptados al calor, lo que refuerza la hipótesis de que el Ártico prehistórico era un ecosistema exuberante y templado. 

“Estos hallazgos nos brindan una ventana a las condiciones pasadas de los gases de efecto invernadero y ayudan a refinar los modelos que predicen el cambio climático futuro”, afirmó Siver.

Uno de los aspectos más relevantes del estudio es la documentación de estegmas fosilizados, un rasgo evolutivo característico de las hojas de palma. Este descubrimiento marca el registro más antiguo conocido de estos patrones lineales de fitolitos, que surgieron a principios del Eoceno, un periodo comprendido entre hace aproximadamente 56 y 34 millones de años y caracterizado por un clima global cálido.

El hallazgo desafía las teorías previas sobre la formación del hielo en el hemisferio norte y sugiere que la Tierra ha experimentado variaciones climáticas extremas en el pasado. Según los investigadores, al comprender mejor cómo los ecosistemas respondieron a estos cambios en épocas anteriores, los científicos pueden mejorar las proyecciones sobre la evolución del clima en el futuro.

Redacción de: Karen Rodríguez A.

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