Icono del sitio The Spanish Media

El nuevo gobierno de Nueva Zelanda elimina la prohibición de fumar

Un año después de aprobar una prohibición de fumar, líder en el mundo y diseñada para salvar miles de vidas y evitar que las nuevas generaciones de adultos jóvenes fumen, Nueva Zelanda ha anunciado un cambio de sentido para ayudar a pagar los recortes de impuestos, enfureciendo a los funcionarios de salud pública y a los grupos antitabaco.

Introducida el año pasado, la ley antitabaco prohibía la venta de tabaco a cualquier persona nacida o después del 1 de enero de 2009.

La legislación debía implementarse en julio de 2024 y habría incluido duras sanciones por violaciones, como multas de hasta 150.000 dólares neozelandeses (96.000 dólares estadounidenses).

El nuevo primer ministro del país, Chris Luxon, cuyo conservador Partido Nacional entró en una alianza de coalición con el populista partido New Zealand First y el libertario ACT New Zealand tras las elecciones de octubre, defendió la controvertida medida, diciendo que no estaba de acuerdo con partes de la política y argumentó que una prohibición resultaría en un auge del mercado negro. Luxon dijo que las tasas de tabaquismo en el país habían ido disminuyendo y reiteró que seguía comprometido a reducir el consumo de tabaco.

La prohibición inicial de fumar en Nueva Zelanda fue aclamada por funcionarios de salud pública de todo el mundo. Meses después del anuncio de Nueva Zelanda, Gran Bretaña también reveló planes para eliminar gradualmente el tabaquismo entre las nuevas generaciones.

Según la Organización Mundial de la Salud, fumar provoca más de ocho millones de muertes cada año en todo el mundo, y una de cada cuatro personas en todo el mundo consume tabaco.

Las tasas de tabaquismo en Nueva Zelanda, que ya se encuentran entre las más bajas del mundo, han ido cayendo y estaban en su nivel más bajo desde que comenzaron los registros, señalaron los expertos, y se estima que 56.000 fumadores dejarán de fumar en 2022.

La reversión de la política de Nueva Zelanda provocó conmoción y condena por parte de funcionarios de salud pública y grupos antitabaco, quienes criticaron al nuevo gobierno por priorizar la economía y la industria tabacalera por encima de las vidas humanas.

Redacción de: Karen Rodríguez

Salir de la versión móvil