A medida que disminuye la última ola de COVID-19 en el país americano, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ha anunciado que el mandato de uso de mascarillas para la mayoría de lugares públicos cerrados ha llegado a su fin.
La gobernadora Hochul, quién había calificado este mandato como temporal en el momento en que se impuso el pasado 31 de diciembre cuando Omicron era una amenaza, esperará a que expire el mandato actual, que ha sido impugnado en la corte, y no piensa intentar renovarlo. Todavía no se tiene claro si la administración renovará o eliminará este mandato en el caso de las escuelas públicas que también expira en dos semanas.
Este tipo de acciones ya vienen realizándose en otros estados liderados por demócratas, como Nueva Jersey, California, Connecticut, Delaware y Oregón, buscando sacar a los residentes cansados de la pandemia de una situación de emergencia y comenzar a buscar la forma de aprender a vivir con el virus, ahora que los casos se encuentran en retroceso.
Sin embargo, la directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, la Dra. Rochelle Walensky, ha dicho que aún no es el momento de eliminar estos mandatos, ni en las escuelas ni lugares públicos, ya que los casos aún son altos en todo el país.