Dollarama ha crecido hasta convertirse en la marca dominante de las tiendas de dólar en Ontario y Quebec, se expande constantemente para traer a sus clientes más carnes enlatadas cuestionables, productos de limpieza sin marca y muchas otras cosas aleatorias que solo pueden describirse como increíblemente barato.
Sin embargo, barato es un término relativo, ya que a medida que la inflación aumenta las facturas de los comestibles en todo el país se tienen que ajustar, así que el lenguaje de marketing de dollarama debe reflejar los tiempos cambiantes.
El minorista anunció el miércoles que pronto presentará productos con un precio fijo de $ 5 o menos, según la última declaración fiscal de la compañía, “a lo largo del año fiscal 2023, la Corporación implementará gradualmente puntos de precio adicionales de hasta $ 5.00. ”
Desde 2015, los artículos en los estantes de Dollarama se han vendido a precios fijos de $ 3.50 y $ 4 o menos, pero incluso ante el aumento en los ingresos netos informado por la compañía, la inflación ha obligado a la compañía a aumentar su precio máximo en un dólar completo.
A medida que su marca se aleja más de la realidad de sus precios, algunas personas han dado un paso al frente con sugerencias para un cambio de marca, muchas de las cuales parecen reflejar mejor los puntos de precio de los artículos de la tienda, muchos sugirieron que la simple adición de una ‘S’ en el medio del nombre podría ser suficiente para corregir el nombre cada vez más engañoso.
Otros fueron un poco más directos, como ” fivebuckerama ” y ” $3rammma “, aunque el premio al nombre por teléfono es para Anthony que propone que dollarama se llame “ya no somos una tienda de un dólar”.
Uno parece pensar que nos estamos moviendo en la dirección de las tiendas de $ 100, que actualmente solo existen en lugares como Rusia con su rublo hundido.
Obviamente, es muy poco probable que Dollarama cambie su nombre de una manera que llame la atención sobre los aumentos de precios, pero la respuesta del público es posiblemente una forma cómica de procesar el temor progresivo que viene con la inflación y el aumento del costo de vida.