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Disminuyen detenciones de migrantes en la frontera de EE.UU. y Canadá

El número de migrantes detenidos por la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos después de ingresar desde Canadá alcanzó en febrero su nivel más bajo desde 2022, según datos de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. publicados el jueves. Sin embargo, las cifras sugieren que más personas están cruzando en dirección opuesta, desde Estados Unidos hacia Canadá.

Durante febrero, las autoridades estadounidenses detuvieron a 481 personas en la frontera norte, una disminución con respecto a las 616 de enero, y significativamente menos que el pico de 3.601 registrado en junio del año pasado. La reducción podría estar vinculada a un ajuste en la aplicación de un acuerdo bilateral entre ambos países, que establece que los solicitantes de asilo que crucen irregularmente en cualquier dirección deben ser rechazados. Un funcionario de la agencia fronteriza estadounidense había adelantado a Reuters que esta modificación en la implementación del acuerdo contribuyó a la caída en los cruces ilegales.

Mientras tanto, las fuerzas del orden en Canadá enfrentan desafíos para frenar los cruces hacia el sur, ya que tienen una capacidad limitada de intervención cuando los migrantes abandonan su territorio rumbo a Estados Unidos. No obstante, el gobierno canadiense ha tomado medidas para frenar la inmigración irregular, incluyendo un mayor control en la emisión de visas. Canadá se encuentra bajo creciente presión luego de que el presidente estadounidense, Donald Trump, citara la migración y el tráfico de fentanilo como justificación para imponer aranceles más estrictos sobre bienes canadienses.

Plan fronterizo

En respuesta, Canadá anunció un plan fronterizo con un presupuesto de 1.300 millones de dólares canadienses y estableció una figura de liderazgo dedicada a combatir la crisis del fentanilo. A pesar de estos esfuerzos, Trump ha mantenido su política de presión, incluyendo amenazas de anexar Canadá, una declaración que ha causado controversia en el país vecino.

Por otro lado, el flujo de migrantes que intentan ingresar a Canadá desde Estados Unidos ha aumentado. En febrero, las autoridades canadienses detuvieron y devolvieron a 126 personas que cruzaron irregularmente desde el sur, la cifra más alta en un año según datos de la Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá.

El gobierno canadiense se ha estado preparando para un posible aumento en la llegada de migrantes que buscan escapar de las políticas de Trump, quien ha prometido implementar deportaciones masivas en caso de ser reelegido. La posibilidad de un éxodo significativo desde Estados Unidos ha generado preocupación en Canadá, donde las autoridades evalúan nuevas estrategias para manejar la situación en su frontera sur.

Redacción de: Karen Rodríguez A. 

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