El presidente electo, Gustavo Petro, informó su segundo nombramiento diplomático. Se trata de Luis Gilberto Murillo, quien será el próximo embajador de Colombia en EE.UU. y llegará a reemplazar a Juan Carlos Pinzó. En gabinetología, Murillo sonaba como posible ministro de Relaciones Exteriores por sus buenas conexiones con Estados Unidos, no obstante, Petro se decantó por Álvaro Leyva con un enfoque de una cancillería para la paz. El nombre del exgobernador de Chocó y exministro de Ambiente no dejó de sonar para otros cargos.
Con mucha resonancia se hablaba que podría ser el embajador de Colombia en EE.UU., aprovechando esas conexiones y buenas relaciones bipartidistas con el país. La demora en su nombramiento estuvo en un impedimento que él tendría. La normativa de Estados Unidos no permite que ciudadanos de ese país ocupen cargos diplomáticos.
Murillo cuenta con dicha ciudadanía, por lo que la única opción para ser embajador en Washington era renunciar a ser ciudadano estadounidense. El mismo Petro, en entrevista con W Radio, expresó que era una decisión personal que debía sopesar el mismo Murillo.
Con la confirmación de su nombramiento, la ex fórmula vicepresidencial de Sergio Fajardo en las pasadas elecciones renunció a su ciudadanía para poder posesionarse en el cargo.
En 1993, cuando el presidente de turno era César Gaviria, Murillo, de sólo 27 años, fue el director de la Corporación para el Desarrollo del Chocó (Codechocó). Después viajó a Bogotá y trabajó codo a codo con Antanas Mockus, durante su alcaldía, en la que estuvo a cargo de la planeación y presupuesto del Departamento Administrativo del Medio Ambiente de Bogotá (DAMA) entre 1995 y 1997.
En 1998 fue elegido como gobernador del Chocó a sus 31 años y es considerado como uno de los más jóvenes para ocupar este cargo en la historia de Colombia. Durante su gobierno propuso una reorganización estatal, fue pionero en la creación de una Secretaría de Asuntos Étnicos y abrió la Oficina de Desarrollo Ambiental de la región.