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Ciudad brasileña promulga una ordenanza escrita en secreto por ChatGPT

Los legisladores municipales de Brasil han dado un paso sin precedentes al aprobar una ordenanza escrita completamente por inteligencia artificial (IA), marcando un hito en el país. La normativa, aprobada en octubre en la ciudad sureña de Porto Alegre, fue revelada recientemente por el concejal Ramiro Rosario, quien admitió que fue elaborada por un chatbot, específicamente el ChatGPT de OpenAI. Esta revelación generó objeciones y planteó preguntas cruciales sobre el papel de la IA en la formulación de políticas públicas.

Rosario confesó a medios de comunicación que solicitó al chatbot que elaborara una propuesta para evitar que la ciudad cobrara a los contribuyentes por la reposición de medidores de consumo de agua en caso de robo. Sorprendentemente, presentó la propuesta a sus colegas del consejo municipal sin realizar ninguna modificación ni siquiera informarles sobre su origen sin precedentes. “Si hubiera revelado antes su origen, la propuesta ni siquiera habría sido considerada para votación”, afirmó Rosario. No obstante, el consejo de 36 miembros aprobó unánimemente la ordenanza, la cual entró en vigor el 23 de noviembre.

La noticia sobre la autoría de la legislación surgió cuando el presidente del concejo municipal, Hamilton Sossmeier, descubrió que Rosario había utilizado ChatGPT para redactar la propuesta. Inicialmente, Sossmeier consideró la situación como un “precedente peligroso”.

Los grandes modelos de lenguaje de IA como ChatGPT, si bien se ven como herramientas prometedoras, han generado preocupaciones sobre la posible inclusión de información falsa, un fenómeno conocido como alucinación.

En otros lugares, legisladores como el senador estatal demócrata Barry Finegold de Massachusetts han empleado ChatGPT para redactar un proyecto de ley destinado a regular los modelos de inteligencia artificial. Finegold destacó la importancia de la transparencia en el uso de esta tecnología en la elaboración de leyes.

En contraste, en Porto Alegre, no se informó a los compañeros del consejo sobre el origen de la propuesta escrita por la IA. Rosario justificó su decisión de no revelar el origen de la propuesta, alegando que su objetivo era no solo resolver un problema local, sino también generar debate.

La acción de Rosario ha avivado un debate en Brasil sobre el uso de la IA en la formulación de políticas públicas, planteando preguntas sobre la transparencia, la fiabilidad y el futuro del papel de la tecnología en la toma de decisiones gubernamentales.

Redacción de: Karen Rodríguez

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