Canadá se está movilizando para promover la equidad de género y los derechos LGBTQ+ en foros internacionales, mientras la administración de Donald Trump busca revertir programas de diversidad dentro de las Naciones Unidas. Bob Rae, embajador de Canadá ante la ONU, advirtió que se libra una “importante lucha” en la comunidad internacional sobre estos temas. Según Rae, Estados Unidos ha comenzado a alinearse con países que rechazan la equidad de género y los derechos de las minorías, incluyendo a Rusia y la Santa Sede.
Medidas desde Estados Unidos
Desde su regreso a la Casa Blanca, Trump ha implementado políticas para reconocer únicamente dos géneros y ha intentado retirar la financiación de iniciativas de diversidad y equidad dentro y fuera de EE.UU. Esto ha impactado directamente en la ONU, donde Washington ha empezado a desafiar el lenguaje de documentos clave.
El mes pasado, por primera vez en la historia, EE.UU. forzó una votación sobre documentos rutinarios de UNICEF, rechazando una moción de consenso después de no lograr eliminar referencias a diversidad y derechos LGBTQ+. En la misma línea, la delegación estadounidense instó a ONU Mujeres a reconocer exclusivamente el sexo biológico y a evitar lo que calificó como “ideología de género” en su agenda.
Para Canadá, estas posturas representan un retroceso preocupante. Rae señaló que la resistencia contra la equidad de género se ha manifestado en debates sobre la mutilación genital femenina, el matrimonio forzado y la discriminación. Estas tensiones también afectan a comités clave de la ONU, como el C34, que históricamente ha promovido la participación de mujeres en operaciones de paz, pero que ahora enfrenta obstáculos para mantener un enfoque de género en su trabajo.
A pesar del giro en la política de EE.UU., Canadá mantiene su compromiso con la promoción de la igualdad de género en la ONU. Esta postura tiene antecedentes en gobiernos tanto liberales como conservadores. Bajo la administración de Stephen Harper, Canadá trabajó con Zambia para presentar resoluciones contra el matrimonio infantil, mientras que el gobierno de Justin Trudeau reforzó ese legado con el nombramiento de un embajador para las mujeres, la paz y la seguridad.
Canadá también está alarmado por la creciente criminalización de la homosexualidad en varias partes del mundo. Rae destacó que, aunque países como India han logrado avances, muchas naciones han endurecido leyes contra la comunidad LGBTQ+, criminalizando incluso la identidad de género y exigiendo la denuncia obligatoria de personas homosexuales.
La ministra de Asuntos Exteriores, Mélanie Joly, afirmó que Canadá seguirá impulsando una “diplomacia pragmática” para encontrar puntos en común con naciones que tienen posturas distintas. Sin embargo, no especificó si Ottawa buscará compensar el vacío dejado por la retirada de EE.UU. en la defensa de los derechos LGBTQ+
Redacción de: Karen Rodríguez A.