El pasado miércoles, el Banco de Canadá elevó su tasa de interés en un punto porcentual completo, una de las razones argumentadas fue la de necesitar controlar la alta inflación que enfrenta el país. Ahora, la agencia Estadísticas Canadá publicará este miércoles el comportamiento de los datos sobre la inflación en el mes de junio.
Recordemos, que en mayo el índice de precios al consumidor alcanzó el 7,7 por ciento, considerado un máximo histórico en casi 40 años. Pues bien, para junio, los economistas pronostican un índice todavía más elevado debido a la subida de los precios de los alimentos y de la energía y una mayor reapertura de la economía.
Según los cálculos de algunos especialistas, la inflación de junio habría alcanzado por lo menos un ocho por ciento. Aseveran, que a medida que se han relajado las restricciones de la pandemia, los precios se han disparado en escala global, -Canadá, no es la excepción- prácticamente en todos los rubros de la economía.
Los datos que respaldan esas afirmaciones pasan por el considerable aumento de los precios de la energía, que fue de un 35 por ciento, en tanto, el precio de los alimentos se incrementó en aproximadamente un 10 por ciento. Para empeorar el cuadro, proveedores han advertido a los minoristas, que se vienen más aumentos.
Esta situación, preocupa a los canadienses que ven que el aumento de sus salarios no acompaña el aumento de los precios. En junio, los salarios promedio por hora, fueron un 5,2 por ciento mayores que hace un año. Sin embargo, esos reajustes, se diluyen, en medio al exagerado aumento de algunos bienes de primera necesidad.
El Banco de Canadá, apunta que las expectativas de inflación entre consumidores y empresas son otro factor que amenaza con mantener las tasas de inflación elevadas. Indicó, que a nivel nacional la economía está “sobrecalentada” pues las empresas luchan por conseguir empleados y la demanda de sus productos continúa fuerte.
Para el Banco de Canadá, las presiones externas son en gran medida responsables por la inflación en el país, el conflicto en Ucrania y los problemas con las cadenas de suministro ejercen presión sobre los precios de la energía y los alimentos, arguyeron. De igual forma, la autoridad monetaria prevé que la inflación llegará al 8 por ciento en los próximos meses, antes de empezar a disminuir al 4,6 por ciento el año 2023.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporter