Las autoridades de Ottawa, tienen la intención de dejar claras las reglas de compensación a los usuarios de líneas aéreas cuando haya interrupciones en los vuelos, aun cuando, estas cancelaciones o incluso retrasos se den por circunstancias ajenas al control de las empresas.
El gobierno federal aprobó el 2023, una legislación destinada a proteger los derechos de los pasajeros, endureciendo las reglas. Desde entonces, la Agencia Canadienses de Transporte ha venido trabajando para modificar las regulaciones de la Ley de Transporte de Canadá.
A través de una mayor rigurosidad de las nuevas normas, las aerolíneas estarán obligadas a demostrar el porqué sucede un determinado retraso o una interrupción de los vuelos. Tendrán la responsabilidad de revelar si se debió a razones de seguridad o a otros factores.
En un comunicado, la ministra de Transporte, Anita Anand, aseveró que la idea es simplificar las reglas para las empresas aéreas y para los pasajeros. Dijo que se espera eliminar las ambigüedades sobre la compensación a la que los usuarios tienen derecho, de esa manera se alcanzarán resoluciones más rápidas para evitar frustraciones entre los pasajeros.
Los cambios que propone el gobierno federal
Las normas dadas a conocer el sábado, por la Agencia Canadiense de Transporte a las Regulaciones de Pasajeros Aéreos, solicitarán a las aerolíneas que toda vez que un vuelo se retrase al menos dos horas, ofrezcan comida y si es necesario alojamiento a los pasajeros.
Asimismo, las compañías aéreas deberán realizar los reembolsos correspondientes en un plazo de 15 días, la mitad del tiempo actual. Cuando su vuelo es cancelado o retrasado (tres horas), el pasajero podrá escoger entre recibir un reembolso o volver a reservar otro vuelo.
Las circunstancias excepcionales y justificadas tienen que ver con amenazas a la seguridad, choques con aves, clima o daños a las aeronaves que podrían afectar la seguridad de los vuelos y los cierres no programados de los aeropuertos, confirmaron las autoridades.
Los valores de las multas establecidas por el gobierno federal, en la legislación de 2023 podrán ser multiplicadas por diez con los cambios propuestos. A partir de la entrada en vigor de la norma, las multas de las aerolíneas podrán alcanzar un máximo de $250,000.
La agencia federal argumenta que estos cambios tienen como objetivo alinearse mejor con las prácticas en la Unión Europea y en Estados Unidos. La ministra Anand, enfatizó que el gobierno continuará trabajando para alcanzar el equilibrio deseado entre proteger los derechos de los pasajeros y al mismo tiempo, promover un sector aéreo competitivo.
Redacción de: J.Bendezu, LJI Reporte
