Un equipo de científicos de renombradas instituciones, liderado por el MIT y la Universidad de Birmingham, ha revelado un innovador método para evaluar la habitabilidad de exoplanetas, publicado en Nature Astronomy. Este hallazgo se centra en la presencia de dióxido de carbono en la atmósfera de estos cuerpos celestes como indicador clave de la existencia de agua líquida, esencial para la habitabilidad tal como se conoce en la Tierra.
La investigación señala que la carencia relativa de dióxido de carbono en comparación con planetas vecinos sugiere la presencia de agua líquida, un factor determinante para la existencia de vida. Los científicos explican que esta disminución podría estar vinculada a su disolución en un océano o su absorción por una biomasa a gran escala.
Hasta ahora, no existía un método práctico para determinar la habitabilidad de exoplanetas, aunque avances previos se habían basado en la búsqueda de un reflejo de luz de las estrellas. No obstante, esta firma era difícil de detectar con la tecnología actual.
Amaury Triaud, codirector del equipo, explicó que medir la cantidad de dióxido de carbono en la atmósfera planetaria es una tarea viable. Destacó que este gas fue predominante en la atmósfera terrestre hasta su disolución en los océanos, lo que permitió la vida como la conocemos.
Además, Julien de Wit, coautor del estudio, enfatizó la posibilidad de utilizar este nuevo método como una “biofirma” para la presencia de vida. La detección de dióxido de carbono y ozono puede proporcionar pistas no solo sobre la habitabilidad del planeta, sino también sobre la existencia de procesos biológicos.
Este avance, aprovechando la firma del dióxido de carbono, plantea nuevas esperanzas para la detección de vida en exoplanetas y ofrece una vía para identificar la habitabilidad y la posibilidad de vida más allá de nuestro sistema solar.
Redacción de: Karen Rodríguez
